Los mercados financieros globales se encuentran en una encrucijada clave. Los traders de Wall Street están apostando a que La Reserva Federal (FED) realizará recortes de tasas más profundos tras los débiles datos de empleo en EE.UU., lo que ha impulsado los futuros de las acciones estadounidenses. Sin embargo, el informe del índice de precios al consumidor (CPI) de EE.UU. que se publicará hoy se ha convertido en una variable clave que determinará la dirección del mercado. Al mismo tiempo, los sólidos datos económicos de Japón también han suscitado especulaciones sobre un aumento de tasas por parte del Banco Central (BoJ), lo que podría generar riesgos de cierre de posiciones en arbitraje de yenes. En esta tormenta macroeconómica, activos de riesgo como Bitcoin están prestando atención a estas señales, y su análisis técnico y demanda institucional sugieren una posible gran fluctuación.
Indicador macroeconómico: apuestas a la baja de tipos de la Reserva Federal y políticas del Banco Central de Japón
Los inversores continúan con un optimismo creciente sobre un recorte de tasas por parte de la Reserva Federal. Los informes de empleo en EE.UU. que fueron más débiles de lo esperado y la caída del índice de precios al productor (IPP) han llevado al mercado a anticipar un recorte de tasas de 25 puntos básicos por parte de la Reserva Federal en septiembre con una probabilidad del 100%. Pero lo más interesante es que las apuestas a un recorte de 50 puntos básicos también han subido del 7% al 8%. Este optimismo ha impulsado el aumento de los futuros de acciones estadounidenses: el Nasdaq 100 E-mini, el S&P 500 E-mini y el Dow Jones E-mini han subido.
Sin embargo, el informe del CPI de EE. UU. será clave para determinar el sentimiento del mercado. Si los datos de inflación son más altos de lo esperado, podrían reducir las apuestas por recortes agresivos de tasas de interés y generar preocupaciones sobre la estanflación, lo que afectaría negativamente al mercado de valores de EE. UU. Por el contrario, si la inflación se enfría, aumentaría la confianza del mercado y elevaría los activos de riesgo.
Al mismo tiempo, los datos económicos de Japón también han añadido incertidumbre al mercado global. En agosto, el índice de precios al productor (IPP) de Japón creció un 2.7% en comparación interanual, y el índice de juicio de la actividad manufacturera (BSI) sorprendió al aumentar un 3.8%, lo que sugiere presiones inflacionarias al alza. Esto refuerza las especulaciones del mercado sobre un posible aumento de tasas por parte del Banco Central de Japón (BoJ) en el cuarto trimestre. La renuncia del primer ministro japonés Shigeru Ishiba, y el apoyo a la política de flexibilización de Sanae Takaichi, quien se ha convertido en un candidato popular para sucederlo, han oscurecido el rumbo de la política monetaria japonesa.
El aumento de tasas de interés en Japón y la reducción de tasas de la Reserva Federal (FED) ampliarán la diferencia de tasas entre el dólar estadounidense y el yen japonés, lo que podría desencadenar el cierre de operaciones de "arbitraje de yen (Yen Carry Trade)". Este tipo de cierre provocó en 2024 una caída del 11.2% en el índice Nasdaq Composite en solo unos días, lo que no debe subestimarse. A pesar de esto, el tipo de cambio del dólar estadounidense frente al yen japonés se mantiene estable alrededor de 147.458, lo que muestra que el mercado tiene una actitud cautelosa ante la incertidumbre futura.
Bitcoin: La situación técnica se está preparando y la demanda institucional regresa
(Fuente: TradingView)
En este contexto macroeconómico, Bitcoin (BTC) está mostrando señales de fuerte potencial de fluctuación. Actualmente, el precio de Bitcoin ronda los 112,236 dólares, y los indicadores técnicos muestran que se encuentra dentro de una formación de triángulo simétrico ascendente.
Puntos clave a corto plazo: el nivel de soporte está en 107,304 dólares, y el nivel de resistencia está en 117,156 dólares. Una vez que se rompa el nivel de resistencia, el objetivo al alza podría dirigirse a 123,731 dólares, 133,882 dólares, y el objetivo a largo plazo podría incluso alcanzar 150,309 dólares.
Señales históricas a largo plazo: Los analistas señalan que las Bandas de Bollinger en el gráfico mensual de Bitcoin se han contraído al nivel más extremo desde 2009. Históricamente, la contracción de las Bandas de Bollinger en 2012, 2016 y 2020 presagió explosivos aumentos de precios, lo que indica que Bitcoin está gestando la mayor fluctuación de precios en la historia.
Patrón alcista: el patrón "taza y asa (Cup-and-Handle)" en el gráfico mensual de Bitcoin continúa siendo confirmado, y su objetivo de precio máximo podría alcanzar los 305,000 dólares entre 2025 y 2026, lo que representa un aumento de más del 170% respecto al precio actual.
Además del aspecto técnico, la demanda institucional también está regresando. A pesar de que los inversores minoristas se han retirado, la empresa de inteligencia de mercado Santiment ha descubierto que los fondos institucionales están regresando a una velocidad "asombrosa" a los ETF de Bitcoin al contado. La empresa japonesa que cotiza en bolsa Metaplanet ha anunciado que recaudará 1.4 mil millones de dólares, de los cuales 1.25 mil millones de dólares se destinarán a la compra de Bitcoin, lo que confirma aún más el fuerte interés de las instituciones en este activo.
Conclusión: esperar señales del IPC, resonancia de activos de riesgo
El informe del CPI de EE. UU. de hoy se convertirá en un evento clave que definirá la dirección del mercado en septiembre. Ya sea para el mercado de valores o para las criptomonedas, el resultado afectará directamente las expectativas de política monetaria de La Reserva Federal (FED) y la aversión al riesgo global. La intersección de la posibilidad de recortes de tasas por parte de la Reserva Federal y aumentos de tasas por parte del Banco Central de Japón también ha añadido complejidad al diferencial de tasas entre el dólar y el yen. Esto indica que, en el entorno actual, tanto las finanzas tradicionales como los activos criptográficos no pueden desligarse del contexto macroeconómico global; todos los activos de riesgo están esperando la misma señal para resonar y danzar.
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Tormenta macroeconómica global: Los datos del CPI marcan el rumbo del mercado, Bitcoin baila con Wall Street
Los mercados financieros globales se encuentran en una encrucijada clave. Los traders de Wall Street están apostando a que La Reserva Federal (FED) realizará recortes de tasas más profundos tras los débiles datos de empleo en EE.UU., lo que ha impulsado los futuros de las acciones estadounidenses. Sin embargo, el informe del índice de precios al consumidor (CPI) de EE.UU. que se publicará hoy se ha convertido en una variable clave que determinará la dirección del mercado. Al mismo tiempo, los sólidos datos económicos de Japón también han suscitado especulaciones sobre un aumento de tasas por parte del Banco Central (BoJ), lo que podría generar riesgos de cierre de posiciones en arbitraje de yenes. En esta tormenta macroeconómica, activos de riesgo como Bitcoin están prestando atención a estas señales, y su análisis técnico y demanda institucional sugieren una posible gran fluctuación.
Indicador macroeconómico: apuestas a la baja de tipos de la Reserva Federal y políticas del Banco Central de Japón
Los inversores continúan con un optimismo creciente sobre un recorte de tasas por parte de la Reserva Federal. Los informes de empleo en EE.UU. que fueron más débiles de lo esperado y la caída del índice de precios al productor (IPP) han llevado al mercado a anticipar un recorte de tasas de 25 puntos básicos por parte de la Reserva Federal en septiembre con una probabilidad del 100%. Pero lo más interesante es que las apuestas a un recorte de 50 puntos básicos también han subido del 7% al 8%. Este optimismo ha impulsado el aumento de los futuros de acciones estadounidenses: el Nasdaq 100 E-mini, el S&P 500 E-mini y el Dow Jones E-mini han subido.
Sin embargo, el informe del CPI de EE. UU. será clave para determinar el sentimiento del mercado. Si los datos de inflación son más altos de lo esperado, podrían reducir las apuestas por recortes agresivos de tasas de interés y generar preocupaciones sobre la estanflación, lo que afectaría negativamente al mercado de valores de EE. UU. Por el contrario, si la inflación se enfría, aumentaría la confianza del mercado y elevaría los activos de riesgo.
Al mismo tiempo, los datos económicos de Japón también han añadido incertidumbre al mercado global. En agosto, el índice de precios al productor (IPP) de Japón creció un 2.7% en comparación interanual, y el índice de juicio de la actividad manufacturera (BSI) sorprendió al aumentar un 3.8%, lo que sugiere presiones inflacionarias al alza. Esto refuerza las especulaciones del mercado sobre un posible aumento de tasas por parte del Banco Central de Japón (BoJ) en el cuarto trimestre. La renuncia del primer ministro japonés Shigeru Ishiba, y el apoyo a la política de flexibilización de Sanae Takaichi, quien se ha convertido en un candidato popular para sucederlo, han oscurecido el rumbo de la política monetaria japonesa.
El aumento de tasas de interés en Japón y la reducción de tasas de la Reserva Federal (FED) ampliarán la diferencia de tasas entre el dólar estadounidense y el yen japonés, lo que podría desencadenar el cierre de operaciones de "arbitraje de yen (Yen Carry Trade)". Este tipo de cierre provocó en 2024 una caída del 11.2% en el índice Nasdaq Composite en solo unos días, lo que no debe subestimarse. A pesar de esto, el tipo de cambio del dólar estadounidense frente al yen japonés se mantiene estable alrededor de 147.458, lo que muestra que el mercado tiene una actitud cautelosa ante la incertidumbre futura.
Bitcoin: La situación técnica se está preparando y la demanda institucional regresa
(Fuente: TradingView)
En este contexto macroeconómico, Bitcoin (BTC) está mostrando señales de fuerte potencial de fluctuación. Actualmente, el precio de Bitcoin ronda los 112,236 dólares, y los indicadores técnicos muestran que se encuentra dentro de una formación de triángulo simétrico ascendente.
Puntos clave a corto plazo: el nivel de soporte está en 107,304 dólares, y el nivel de resistencia está en 117,156 dólares. Una vez que se rompa el nivel de resistencia, el objetivo al alza podría dirigirse a 123,731 dólares, 133,882 dólares, y el objetivo a largo plazo podría incluso alcanzar 150,309 dólares.
Señales históricas a largo plazo: Los analistas señalan que las Bandas de Bollinger en el gráfico mensual de Bitcoin se han contraído al nivel más extremo desde 2009. Históricamente, la contracción de las Bandas de Bollinger en 2012, 2016 y 2020 presagió explosivos aumentos de precios, lo que indica que Bitcoin está gestando la mayor fluctuación de precios en la historia.
Patrón alcista: el patrón "taza y asa (Cup-and-Handle)" en el gráfico mensual de Bitcoin continúa siendo confirmado, y su objetivo de precio máximo podría alcanzar los 305,000 dólares entre 2025 y 2026, lo que representa un aumento de más del 170% respecto al precio actual.
Además del aspecto técnico, la demanda institucional también está regresando. A pesar de que los inversores minoristas se han retirado, la empresa de inteligencia de mercado Santiment ha descubierto que los fondos institucionales están regresando a una velocidad "asombrosa" a los ETF de Bitcoin al contado. La empresa japonesa que cotiza en bolsa Metaplanet ha anunciado que recaudará 1.4 mil millones de dólares, de los cuales 1.25 mil millones de dólares se destinarán a la compra de Bitcoin, lo que confirma aún más el fuerte interés de las instituciones en este activo.
Conclusión: esperar señales del IPC, resonancia de activos de riesgo
El informe del CPI de EE. UU. de hoy se convertirá en un evento clave que definirá la dirección del mercado en septiembre. Ya sea para el mercado de valores o para las criptomonedas, el resultado afectará directamente las expectativas de política monetaria de La Reserva Federal (FED) y la aversión al riesgo global. La intersección de la posibilidad de recortes de tasas por parte de la Reserva Federal y aumentos de tasas por parte del Banco Central de Japón también ha añadido complejidad al diferencial de tasas entre el dólar y el yen. Esto indica que, en el entorno actual, tanto las finanzas tradicionales como los activos criptográficos no pueden desligarse del contexto macroeconómico global; todos los activos de riesgo están esperando la misma señal para resonar y danzar.