Últimamente, en el sector financiero todo el mundo habla de lo mismo: la Reserva Federal podría recortar los tipos de interés en diciembre. No es un “quizá”, es del tipo “muy probable”.
¿Por qué han empezado a hablar de recortes de tipos otra vez? En pocas palabras, los datos de empleo en EE. UU. empiezan a flojear. El mercado laboral se enfría, el desempleo sube ligeramente y las empresas muestran menos ganas de contratar. No es una buena señal para el crecimiento económico. Además, aunque la inflación aún no ha vuelto del todo al objetivo, la tendencia a la baja es clara, lo que da margen de maniobra a la Fed.
Varias instituciones prevén que esta vez la Fed probablemente bajará 25 puntos básicos (es decir, un 0,25%). ¿Y el mercado se lo cree? Los datos de la herramienta FedWatch de CME están ahí: los traders ya han apostado con dinero real, la probabilidad es altísima.
Una vez que se forma la expectativa de recorte, el impacto va mucho más allá de “el número del tipo de interés baja”. Toda la lógica de valoración de los activos puede cambiar.
Empecemos por la bolsa. El coste de financiación disminuye, las empresas pueden conseguir dinero más barato, las hipotecas y los créditos al consumo se alivian, y la mayor liquidez impulsa el apetito por el riesgo. Las acciones de crecimiento, tecnológicas y los bonos de alto rendimiento —todos esos activos “adictos a la liquidez”— suelen subir primero. Y también los bonos: cuando bajan los tipos, suben los precios de los bonos (sobre todo los bonos del Estado a largo plazo) y bajan sus rendimientos.
¿Y el dólar? Normalmente, una bajada de tipos significa un dólar más débil, porque tener activos en dólares resulta menos atractivo. Es entonces cuando el oro, la plata y otros metales preciosos brillan de verdad: su función refugio, sumada a las expectativas de inflación, atrae capital hacia estos activos.
En el mercado de criptomonedas, la expectativa de recortes también es un factor. Un entorno monetario más laxo suele beneficiar a los activos de riesgo; BTC, ETH y otras criptomonedas principales pueden verse favorecidas por la mejora de la liquidez y la expectativa de depreciación del dólar. Por supuesto, la evolución concreta dependerá del sentimiento del mercado y de la dinámica regulatoria.
¿Y cómo lo ve el mercado ahora? La mayoría cree que el recorte de tipos en diciembre está “prácticamente asegurado”. Pero no olvides que la Fed nunca se compromete de antemano. Powell y su equipo siguen muy atentos a los datos de inflación, empleo y PIB. Si los datos mejoran de repente, el recorte podría ser menor o posponerse.
Si tienes posiciones, quizá sea el momento de revisar tu asignación. Las acciones, materias primas y activos internacionales podrían verse beneficiados; pero si prefieres la renta fija (como bonos y depósitos), un recorte significa menor rentabilidad, así que tendrás que considerar el riesgo de tipos y nuevas opciones de asignación.
En resumen, la expectativa de recorte de tipos no es solo una “noticia”; es un punto de inflexión en la lógica de valoración de todo el mercado.
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AlwaysAnon
· 12-09 10:50
He empezado a hacer arbitraje y acumular criptomonedas.
Últimamente, en el sector financiero todo el mundo habla de lo mismo: la Reserva Federal podría recortar los tipos de interés en diciembre. No es un “quizá”, es del tipo “muy probable”.
¿Por qué han empezado a hablar de recortes de tipos otra vez? En pocas palabras, los datos de empleo en EE. UU. empiezan a flojear. El mercado laboral se enfría, el desempleo sube ligeramente y las empresas muestran menos ganas de contratar. No es una buena señal para el crecimiento económico. Además, aunque la inflación aún no ha vuelto del todo al objetivo, la tendencia a la baja es clara, lo que da margen de maniobra a la Fed.
Varias instituciones prevén que esta vez la Fed probablemente bajará 25 puntos básicos (es decir, un 0,25%). ¿Y el mercado se lo cree? Los datos de la herramienta FedWatch de CME están ahí: los traders ya han apostado con dinero real, la probabilidad es altísima.
Una vez que se forma la expectativa de recorte, el impacto va mucho más allá de “el número del tipo de interés baja”. Toda la lógica de valoración de los activos puede cambiar.
Empecemos por la bolsa. El coste de financiación disminuye, las empresas pueden conseguir dinero más barato, las hipotecas y los créditos al consumo se alivian, y la mayor liquidez impulsa el apetito por el riesgo. Las acciones de crecimiento, tecnológicas y los bonos de alto rendimiento —todos esos activos “adictos a la liquidez”— suelen subir primero. Y también los bonos: cuando bajan los tipos, suben los precios de los bonos (sobre todo los bonos del Estado a largo plazo) y bajan sus rendimientos.
¿Y el dólar? Normalmente, una bajada de tipos significa un dólar más débil, porque tener activos en dólares resulta menos atractivo. Es entonces cuando el oro, la plata y otros metales preciosos brillan de verdad: su función refugio, sumada a las expectativas de inflación, atrae capital hacia estos activos.
En el mercado de criptomonedas, la expectativa de recortes también es un factor. Un entorno monetario más laxo suele beneficiar a los activos de riesgo; BTC, ETH y otras criptomonedas principales pueden verse favorecidas por la mejora de la liquidez y la expectativa de depreciación del dólar. Por supuesto, la evolución concreta dependerá del sentimiento del mercado y de la dinámica regulatoria.
¿Y cómo lo ve el mercado ahora? La mayoría cree que el recorte de tipos en diciembre está “prácticamente asegurado”. Pero no olvides que la Fed nunca se compromete de antemano. Powell y su equipo siguen muy atentos a los datos de inflación, empleo y PIB. Si los datos mejoran de repente, el recorte podría ser menor o posponerse.
Si tienes posiciones, quizá sea el momento de revisar tu asignación. Las acciones, materias primas y activos internacionales podrían verse beneficiados; pero si prefieres la renta fija (como bonos y depósitos), un recorte significa menor rentabilidad, así que tendrás que considerar el riesgo de tipos y nuevas opciones de asignación.
En resumen, la expectativa de recorte de tipos no es solo una “noticia”; es un punto de inflexión en la lógica de valoración de todo el mercado.