Las declaraciones recientes de Washington destacan los aranceles como una palanca clave de la política exterior. Según afirmaciones oficiales, la estrategia arancelaria ha generado billones en ingresos y entradas de inversión extranjera. De manera más provocadora, las amenazas de escalada arancelaria supuestamente detuvieron cinco de ocho conflictos globales en curso. Ya sea que se considere esto como diplomacia económica o como una maniobra geopolítica arriesgada, hay algo claro: la política comercial se está utilizando como arma como nunca antes. Los mercados odian la incertidumbre, pero adoran los movimientos decisivos. ¿Cuánto falta para que la volatilidad de las divisas se traslade a las criptomonedas? Habrá que estar atentos.