El viernes pasado, el muy publicitado caso de fraude de MEV Bros “se descarriló” en el último momento: después de tres días de intensos debates, el jurado aún no pudo llegar a un acuerdo, lo que resultó en la anulación del caso y la necesidad de un nuevo juicio.
Los dos acusados involucrados en este caso son los hermanos Anton y James Peraire-Bueno, quienes están acusados de robar 25 millones de dólares de un comerciante de Ethereum. La acusación central es que los dos utilizaron los permisos de la capa de validación de Ethereum para transferir fondos de los usuarios manipulando el orden de las transacciones. Sin embargo, los abogados defensores afirman que sus acciones estaban completamente alineadas con la lógica del protocolo y no eran ilegales.
¿Por qué es tan importante este caso?
Este no es solo un caso ordinario de fraude criptográfico. Es la primera demanda penal en el mundo relacionada con MEV (valor máximo extraíble). Si se condena, afectará directamente el comportamiento normativo de los validadores dentro del ecosistema de Ethereum y establecerá un precedente para los estándares de seguridad en todo el campo de DeFi.
¿Qué pasará a continuación?
El Departamento de Justicia de EE. UU. ahora tiene tres opciones: continuar con la acusación, buscar un acuerdo de culpabilidad o retirar los cargos. Cualquiera que sea el camino, este caso seguirá generando discusiones en la comunidad de criptomonedas: ¿qué es exactamente un “acuerdo de uso razonable” y qué es “explotación maliciosa”? ¿Dónde está la línea?
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El jurado del caso MEV Bros está en un punto muerto, el primer caso de "extracción de valor" en Ethereum se declara nulo.
El viernes pasado, el muy publicitado caso de fraude de MEV Bros “se descarriló” en el último momento: después de tres días de intensos debates, el jurado aún no pudo llegar a un acuerdo, lo que resultó en la anulación del caso y la necesidad de un nuevo juicio.
Los dos acusados involucrados en este caso son los hermanos Anton y James Peraire-Bueno, quienes están acusados de robar 25 millones de dólares de un comerciante de Ethereum. La acusación central es que los dos utilizaron los permisos de la capa de validación de Ethereum para transferir fondos de los usuarios manipulando el orden de las transacciones. Sin embargo, los abogados defensores afirman que sus acciones estaban completamente alineadas con la lógica del protocolo y no eran ilegales.
¿Por qué es tan importante este caso?
Este no es solo un caso ordinario de fraude criptográfico. Es la primera demanda penal en el mundo relacionada con MEV (valor máximo extraíble). Si se condena, afectará directamente el comportamiento normativo de los validadores dentro del ecosistema de Ethereum y establecerá un precedente para los estándares de seguridad en todo el campo de DeFi.
¿Qué pasará a continuación?
El Departamento de Justicia de EE. UU. ahora tiene tres opciones: continuar con la acusación, buscar un acuerdo de culpabilidad o retirar los cargos. Cualquiera que sea el camino, este caso seguirá generando discusiones en la comunidad de criptomonedas: ¿qué es exactamente un “acuerdo de uso razonable” y qué es “explotación maliciosa”? ¿Dónde está la línea?
Esperando la nueva ronda de audiencias.