Hoy un analista, Willy Woo, desmintió un rumor: se decía que las ballenas antiguas estaban tirando el precio de BTC y que desde el 15 de octubre hasta ahora han vendido 28.000 BTC.

Pero él señaló que estos datos se han interpretado en exceso. El problema está en la definición de "holders a largo plazo": basta con que las monedas no se muevan en 5 meses para ser clasificadas así. Por tanto, el "aumento del suministro de holders a largo plazo" en realidad significa que las compras de hace 5 meses ahora son reconocidas por el sistema como de largo plazo.

En resumen: en la blockchain sí hay algo de toma de beneficios, pero son movimientos menores. Los datos del mercado parecen bajistas, pero en realidad es una falsa alarma. No hay motivo para entrar en pánico.