¿La esencia de la temporada de altcoins? En pocas palabras, el dinero persigue las ganancias de porcentaje.

La lógica es muy simple: cuando Bitcoin sube a niveles que llaman la atención, los inversores tempranos comienzan a tomar ganancias y a salir. ¿A dónde va ese dinero? A buscar nuevas oportunidades, por lo que toda la atención se concentra en esas altcoins y nuevos proyectos que aún no han subido mucho y cuyos tokens no tienen una participación pesada. Esto es un clásico efecto de fuga de capital.

Pero esta vez es un poco diferente. Aunque Bitcoin alcanzó los 110,000 dólares, al hacer los cálculos, se descubre que las ganancias en esta ronda no son tan grandes como en ciclos anteriores. Como las ganancias son menores, también sale menos dinero.

¿El resultado? El año pasado, las altcoins tuvieron un pico, pero fue efímero, y rápidamente entraron en una corrección bajista. La inversión no fue lo suficientemente fuerte, por lo que el mercado no pudo levantarse.