Los costos ocultos de financiar sus comestibles

robot
Generación de resúmenes en curso

He observado con creciente inquietud cómo los servicios de compra ahora, paga después (BNPL) se expanden a lo esencial de la vida cotidiana, como los alimentos. Con los precios de los alimentos proyectados para subir otro 2% en 2025 gracias a los aranceles de Trump y los problemas de la cadena de suministro, estos planes de pago parecen tentadores. Pero, ¿realmente estamos en un punto en el que las necesidades básicas necesitan financiación?

Cuando vi por primera vez las opciones de BNPL en la caja para mi compra semanal de comestibles, me sentí conflicted. Por un lado, dividir $200 en cuatro pagos manejables suena práctico cuando el dinero escasea. Por otro lado, se siente como una nueva normalidad peligrosa—normalizando la deuda por artículos que deberían ser necesidades presupuestadas.

Varios proveedores ahora ofrecen planes de pago para comestibles. Affirm se asocia con Target y Walmart, pero cobra hasta un 36% de APR en planes más largos. Afterpay ofrece pagos sin intereses, pero te cobra tarifas por retraso si te pierdes un pago. PayPal proporciona múltiples opciones, incluyendo términos de seis meses sin intereses a través de PayPal Credit. Quizás lo más flexible sea Splitit, que trabaja con tu tarjeta de crédito existente para crear planes de pago personalizados para comestibles en cualquier lugar.

El discurso de marketing es seductor: gestiona tu flujo de caja, facilita la elaboración de presupuestos, evita intereses si pagas a tiempo. Pero lo que estos servicios no enfatizan es cómo pueden enmascarar problemas financieros más profundos. Cuando necesitas financiar necesidades básicas, a menudo es una señal de advertencia de gastos insostenibles o ingresos inadecuados.

También me preocupa el impacto psicológico. Estos servicios eliminan el dolor financiero inmediato de la compra, lo que facilita gastar de más. Antes de que te des cuenta, estás manejando múltiples planes de pago a través de diferentes aplicaciones, creando una imagen financiera fragmentada que es difícil de seguir.

Aunque BNPL puede ayudar en emergencias genuinas, depender de ellos regularmente para comprar comestibles crea una pendiente resbaladiza. Esencialmente, estás pidiendo prestado a tu yo futuro, un yo futuro que también necesitará comer el próximo mes. Es un ciclo que es difícil de romper una vez que comienza.

Si debes utilizar estos servicios, procede con extrema precaución. Lee la letra pequeña, entiende todas las tarifas potenciales y ten un plan claro para el reembolso. Pero quizás la mejor pregunta sea: si necesitas financiar tus comestibles, ¿qué otros ajustes presupuestarios podrían abordar el problema raíz?

La normalización de la financiación de lo esencial diario refleja nuestra relación cambiante con la deuda y el consumo. Vale la pena preguntarse si esto es un avance o simplemente otra forma de enmascarar la creciente desigualdad económica.

Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
  • Recompensa
  • Comentar
  • Republicar
  • Compartir
Comentar
0/400
Sin comentarios
  • Anclado
Opera con criptomonedas en cualquier momento y lugar
qrCode
Escanee para descargar la aplicación Gate
Comunidad
Español
  • 简体中文
  • English
  • Tiếng Việt
  • 繁體中文
  • Español
  • Русский
  • Français (Afrique)
  • Português (Portugal)
  • Bahasa Indonesia
  • 日本語
  • بالعربية
  • Українська
  • Português (Brasil)