Estados Unidos está quemando dinero y electricidad, ansioso por liderar la carrera de la IA frente a China, pero las estrategias de ambos son completamente diferentes. Washington sueña con crear una AGI que supere la inteligencia humana, y el gobierno de Trump incluso advirtió que esto podría alterar el orden global. ¿Y China? Ellos han optado por un camino más pragmático.
Xi Jinping pidió a las empresas de tecnología chinas que se centren en desarrollar herramientas prácticas, en lugar de perseguir fantasías inalcanzables. Espera que la IA pueda ayudar a los agricultores a cultivar arroz, asistir a la policía en respuestas rápidas, y el objetivo final es aumentar la eficiencia de la vida y llevar estos sistemas a nivel global.
La práctica en China es muy directa: aplican modelos de lenguaje en chino similares a ChatGPT para la evaluación de exámenes escolares, mejorar la precisión de las predicciones meteorológicas, coordinar equipos de emergencia y proporcionar recomendaciones de cultivo a los agricultores. Los médicos de la Universidad Tsinghua están utilizando IA para ofrecer ideas médicas, mientras que los robots en fábricas sin mano de obra realizan inspecciones de textiles y producción de automóviles.
Estados Unidos también está desarrollando herramientas prácticas, como la función de traducción instantánea del teléfono Google Pixel, pero Washington no gestiona directamente estos campos. China, en cambio, es diferente; el gobierno está profundamente involucrado. En enero de este año, Pekín estableció un fondo especial de 8,4 mil millones de dólares para startups de IA, y varias provincias y ciudades están siguiendo su ejemplo.
Creo que la estrategia de IA de código abierto de China es especialmente inteligente. Sus modelos se pueden descargar y modificar de forma gratuita, lo que reduce costos y ayuda a las empresas locales a desarrollarse rápidamente. Esta práctica incluso ha influido en Occidente, ya que algunos desarrolladores estadounidenses también han comenzado a adoptar modelos abiertos.
En comparación, OpenAI, Meta y Google siguen apostando por AGI, esperando que pueda abrir nuevos campos y proporcionar ventajas a Estados Unidos en futuros conflictos. Para ello, estas empresas están acumulando chips de manera frenética, reclutando talento y construyendo grandes centros de datos. El Congreso de Estados Unidos incluso ha propuesto el "Plan Manhattan" para AGI.
Pero este camino no es fácil. El GPT-5 de OpenAI no ha cumplido con sus promesas, y Sam Altman incluso advirtió sobre la posible existencia de una burbuja de inversión en IA. Eric Schmidt, ex CEO de Google, y la analista Xu Shiling señalaron en el New York Times: "Si solo nos obsesionamos con AGI, podríamos quedarnos atrás de China, porque ellos se centran más en aprovechar la tecnología existente."
La nueva área de Xiong'an es un reflejo del pragmatismo de la IA en China. Los agricultores locales utilizan la IA para seleccionar cultivos, gestionar plagas y enfermedades, y planificar la siembra; el departamento meteorológico la utiliza para mejorar las predicciones; la policía la usa para analizar datos de casos; la línea directa del gobierno maneja cientos de miles de llamadas al día, utilizando IA para clasificar y enrutar. Estos no son proyectos piloto, sino sistemas prácticos que ya están en funcionamiento.
China ciertamente también está construyendo centros de datos, pero a una escala menor, diseñados para apoyar aplicaciones existentes en lugar de entrenar AGI. Las restricciones de Estados Unidos sobre los chips de alta gama han llevado a China a enfocarse más en el despliegue que en la investigación y el desarrollo.
Sin embargo, China no ha abandonado por completo el sueño de la IA general. Alibaba y DeepSeek han declarado tener como objetivo el AGI. Los analistas creen que Xi Jinping podría estar simplemente adoptando una actitud cautelosa hacia el AGI de forma temporal.
¿En esta competición de IA, la ruta pragmática de China finalmente triunfará? ¿Vale la pena invertir tanto capital en el sueño de AGI de Estados Unidos? Esta confrontación de estrategias de IA entre Oriente y Occidente merece nuestra continua atención.
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Estrategia de IA de Estados Unidos y China: la lucha entre lo práctico y lo ideal
Estados Unidos está quemando dinero y electricidad, ansioso por liderar la carrera de la IA frente a China, pero las estrategias de ambos son completamente diferentes. Washington sueña con crear una AGI que supere la inteligencia humana, y el gobierno de Trump incluso advirtió que esto podría alterar el orden global. ¿Y China? Ellos han optado por un camino más pragmático.
Xi Jinping pidió a las empresas de tecnología chinas que se centren en desarrollar herramientas prácticas, en lugar de perseguir fantasías inalcanzables. Espera que la IA pueda ayudar a los agricultores a cultivar arroz, asistir a la policía en respuestas rápidas, y el objetivo final es aumentar la eficiencia de la vida y llevar estos sistemas a nivel global.
La práctica en China es muy directa: aplican modelos de lenguaje en chino similares a ChatGPT para la evaluación de exámenes escolares, mejorar la precisión de las predicciones meteorológicas, coordinar equipos de emergencia y proporcionar recomendaciones de cultivo a los agricultores. Los médicos de la Universidad Tsinghua están utilizando IA para ofrecer ideas médicas, mientras que los robots en fábricas sin mano de obra realizan inspecciones de textiles y producción de automóviles.
Estados Unidos también está desarrollando herramientas prácticas, como la función de traducción instantánea del teléfono Google Pixel, pero Washington no gestiona directamente estos campos. China, en cambio, es diferente; el gobierno está profundamente involucrado. En enero de este año, Pekín estableció un fondo especial de 8,4 mil millones de dólares para startups de IA, y varias provincias y ciudades están siguiendo su ejemplo.
Creo que la estrategia de IA de código abierto de China es especialmente inteligente. Sus modelos se pueden descargar y modificar de forma gratuita, lo que reduce costos y ayuda a las empresas locales a desarrollarse rápidamente. Esta práctica incluso ha influido en Occidente, ya que algunos desarrolladores estadounidenses también han comenzado a adoptar modelos abiertos.
En comparación, OpenAI, Meta y Google siguen apostando por AGI, esperando que pueda abrir nuevos campos y proporcionar ventajas a Estados Unidos en futuros conflictos. Para ello, estas empresas están acumulando chips de manera frenética, reclutando talento y construyendo grandes centros de datos. El Congreso de Estados Unidos incluso ha propuesto el "Plan Manhattan" para AGI.
Pero este camino no es fácil. El GPT-5 de OpenAI no ha cumplido con sus promesas, y Sam Altman incluso advirtió sobre la posible existencia de una burbuja de inversión en IA. Eric Schmidt, ex CEO de Google, y la analista Xu Shiling señalaron en el New York Times: "Si solo nos obsesionamos con AGI, podríamos quedarnos atrás de China, porque ellos se centran más en aprovechar la tecnología existente."
La nueva área de Xiong'an es un reflejo del pragmatismo de la IA en China. Los agricultores locales utilizan la IA para seleccionar cultivos, gestionar plagas y enfermedades, y planificar la siembra; el departamento meteorológico la utiliza para mejorar las predicciones; la policía la usa para analizar datos de casos; la línea directa del gobierno maneja cientos de miles de llamadas al día, utilizando IA para clasificar y enrutar. Estos no son proyectos piloto, sino sistemas prácticos que ya están en funcionamiento.
China ciertamente también está construyendo centros de datos, pero a una escala menor, diseñados para apoyar aplicaciones existentes en lugar de entrenar AGI. Las restricciones de Estados Unidos sobre los chips de alta gama han llevado a China a enfocarse más en el despliegue que en la investigación y el desarrollo.
Sin embargo, China no ha abandonado por completo el sueño de la IA general. Alibaba y DeepSeek han declarado tener como objetivo el AGI. Los analistas creen que Xi Jinping podría estar simplemente adoptando una actitud cautelosa hacia el AGI de forma temporal.
¿En esta competición de IA, la ruta pragmática de China finalmente triunfará? ¿Vale la pena invertir tanto capital en el sueño de AGI de Estados Unidos? Esta confrontación de estrategias de IA entre Oriente y Occidente merece nuestra continua atención.