El concepto y el futuro de los nombres de dominio Web3 descentralizados

El mundo de los dominios Web3 me fascina. A diferencia de las aburridas direcciones DNS tradicionales, estos dominios son mucho más que simples etiquetas en internet. ¡Son activos digitales que puedes poseer de verdad!

¿Qué demonios es un dominio Web3?

Los dominios Web3 son la respuesta a esas horribles cadenas hexadecimales de 42 caracteres que nadie puede recordar. En vez de memorizar algo como 0x483add48edbd9f83fb5db0289c7ed48c83f56992 (¿quién demonios puede recordar esto?), simplemente usas algo como "midominio.crypto".

Lo mejor es que estos dominios son NFTs, certificados digitales que puedes comerciar en mercados como OpenSea. Y vienen con extensiones como .crypto, .dao o .eth.

Es obvio por qué están ganando popularidad. Es mucho más fácil "enviar dinero a bob.eth" que a una dirección imposible de recordar. Además, Web3 busca quitarle el control a los monstruos tecnológicos que dominan internet actualmente. Ya era hora que alguien les plantara cara a estos gigantes monopolistas.

La blockchain tradicional tiene limitaciones que asustan a cualquier persona normal. ¿Quién querría usar algo que parece un código alienígena? Los mismos problemas que tuvo Internet en sus inicios. Necesitamos identidades digitales fáciles de usar para que esto despegue de una vez.

El Servicio de Nombres de Ethereum: simpleza genial

ENS convierte esas horribles direcciones en nombres que cualquiera puede entender. La web comenzó como algo descentralizado donde tenías control total, pero lo perdimos en el camino. ENS nos devuelve algo de esa libertad.

El servicio funciona mediante tres contratos inteligentes:

• Registro: Mantiene un registro de quién es dueño de qué dominio.
• Registrador: Es quien realmente maneja el proceso de registro siguiendo ciertas reglas.
• Analizador: Convierte los nombres en direcciones utilizables.

En 2017 empezaron con subastas tipo Vickrey (donde pagas la segunda oferta más alta), pero en 2019 cambiaron a un modelo más simple con un costo anual de $5. Mucho más accesible que algunos dominios tradicionales, si me preguntas.

¿Para qué sirve un dominio .eth?

Lo más obvio: convertir números feos en palabras bonitas. Pero van más allá. Los puedes usar para contratos inteligentes, metadatos o transacciones.

Lo curioso es que a pesar de los millones de usuarios de blockchain, ¡solo hay unos cientos de miles de dominios registrados! Esto grita "oportunidad" para cualquiera con dos dedos de frente. La demanda está ahí, esperando explotar en cualquier momento.

Y sí, también puedes alquilarlos o hacer contratos de arrendamiento, igual que con dominios tradicionales.

Cómo registrar tu propio dominio .eth

Si quieres tu pedacito del futuro web, es bastante sencillo:

1. Inicia sesión con una billetera Ethereum (necesitarás algo de ETH para las tarifas).
2. Ve a app.ens.domains y busca el nombre que quieres.
3. Elige por cuánto tiempo quieres registrarlo (mínimo un año).
4. Confirma la transacción y espera un minuto.
5. Completa el registro con otra transacción y ¡listo!

El futuro de los nombres de dominio Web3

ENS está haciendo con las transacciones cripto lo que PayPal hizo con los pagos online: simplificarlos hasta el punto que cualquiera puede usarlos.

Creo que veremos un boom de estos nombres igual que dejamos de usar direcciones IP para navegar por la web. Las empresas serán más transparentes gracias al alojamiento Web3, y los usuarios tendremos más control sobre nuestros datos.

La revolución blockchain apenas comienza, y los dominios Web3 son la puerta de entrada para que todos podamos participar. Solo espero que no tarden demasiado en darse cuenta de su potencial, o perderemos otra oportunidad de oro para democratizar internet.