La moneda de los Estados Unidos, conocida como dólar americano, desempeña un papel crucial en el escenario financiero internacional. Representada por el símbolo "$" o por la sigla "USD", esta divisa no se limita solo al territorio norteamericano y sus dependencias, sino que extiende su influencia a diversas naciones alrededor del globo.

En el ámbito de las transacciones internacionales, el dólar estadounidense se destaca como la moneda más utilizada, consolidando su posición como la principal reserva monetaria mundial. Su preponderancia es tan significativa que diversos países optaron por adoptarla como su moneda oficial, mientras que otros la emplean de facto en sus operaciones cotidianas o vinculan sus monedas nacionales al dólar a través de tasas de cambio fijas.

La gestión de la política monetaria relacionada con el dólar está bajo la responsabilidad del Sistema de la Reserva Federal, entidad que actúa como banco central de los Estados Unidos. Esta institución no solo define las directrices monetarias, sino que también está encargada de la emisión física de la moneda.

Para fines de identificación en operaciones financieras internacionales, el dólar americano es reconocido por el código ISO 4217 como USD. Este código estandarizado facilita las transacciones y el reconocimiento de la moneda a escala global, reforzando su estatus como referencia monetaria internacional.