CAGR - ¿qué es realmente y para qué lo necesitamos?

CAGR, o tasa media de crecimiento anual... Suena complicado, ¿verdad? A los banqueros les encantan esos términos. Pero vamos, seamos honestos: es solo un indicador que nos ayuda a entender cuán rápido suben ( o caen ) nuestras inversiones.

Personalmente, utilizo la tasa media de crecimiento anual cuando me canso de escuchar a los traders presumir de sus "x". Uno dice: "¡Subí un 200% en un mes!", otro grita: "¡Y yo un 50% en un trimestre!". Pero, ¿cómo comparar estos resultados? Aquí es donde viene a ayudar nuestra tasa media de crecimiento anual.

¿Qué es esta bestia?

La tasa media de crecimiento anual muestra a qué velocidad crecería su inversión si el crecimiento fuera uniforme cada año. En esencia, es un valor promedio que suaviza todos los altibajos.

Fórmula para el cálculo:

CAGR = (valor final / valor inicial)^(1 / número de años) - 1

Para no atormentar la mente, así es como funciona:

1. Tomamos la suma final y la dividimos por la inicial
2. Elevamos a la potencia (1 / cantidad de años )
3. Restamos uno
4. Convertimos a porcentajes multiplicando por 100

¿Para qué lo necesito?

Utilizo el CAGR para comparar diferentes activos. Cuando alguien comienza a presumir de sus superingresos en alguna moneda de moda, le pido que muestre el CAGR de 3 años. Y a menudo la conversación termina rápidamente...

CAGR no muestra el rendimiento real; es más bien una representación simplificada. Es como decir: "Si tu dinero creciera a la misma velocidad cada año, en lugar de saltar como loco, entonces el crecimiento sería del X% al año".

Me molesta cuando la gente toma decisiones basadas en indicadores a corto plazo. El CAGR nos obliga a mirar a largo plazo. Por ejemplo, el índice de la Bolsa de Moscú creció aproximadamente un 15,7% al año desde 2000 hasta 2021. ¡Y esto es mucho más importante saberlo que el hecho de que alguna moneda haya subido un 200% en un mes!

Según mi experiencia, este es uno de los indicadores más sensatos para evaluar inversiones. Sin esta cifra, probablemente ya habría gastado todo mi dinero en proyectos de moda que prometían montañas de oro.