Musk vs. Trump...
Entonces, el bromance entre Musk y Trump parece haber chocado contra un muro, al menos por ahora. El último drama comenzó por el llamado "Proyecto de Ley Grande y Hermoso", una propuesta fiscal respaldada por Trump que Musk atacó con fuerza. La llamó inflada, llena de "pork", y advirtió que haría que el déficit federal se disparara. En el clásico estilo de Musk, no se contuvo: criticó el proyecto de ley en múltiples tweets e incluso lanzó indirectas a los legisladores que lo apoyaban.
Curiosamente, Musk enfatizó que su crítica no era personal, solo sobre la política. Incluso dijo que está de acuerdo con que se recorten los subsidios para vehículos eléctricos, siempre que también se elimine el gasto innecesario. Aun así, es un gran asunto ver a alguien como Musk cuestionar públicamente a un presidente con el que alguna vez trabajó estrechamente.
Trump, por su parte, trató de restarle importancia—diciendo a través de asistentes que las opiniones de Musk no cambiarán su postura ni un poco. Pero Musk luego subió la apuesta al respaldar una publicación que pedía el juicio político de Trump y sugiriendo que el vicepresidente J.D. Vance se hiciera cargo. Oof.
Dicho esto, honestamente no creo que estos dos alguna vez estuvieran destinados a "pertenecer juntos" en primer lugar. Sus metas y personalidades son demasiado diferentes: Trump prospera en el control y la narrativa, mientras que Musk prospera en el caos y tener razón. Pero con cómo Trump ha estado jugando el juego últimamente, ¿quién sabe? Dale un mes o dos y podrían estar alabándose mutuamente de nuevo como si nunca hubiera pasado nada.