El lenguaje Move se origina en Meta y enfatiza un modelo orientado a recursos, asegurando que los activos digitales no sean replicables y no puedan ser transferidos arbitrariamente, mejorando así la seguridad de los contratos inteligentes. A través de un análisis estático riguroso y la validación de formatos, reduce significativamente las vulnerabilidades de programación y los riesgos de activos.
El sistema se divide en cuatro capas: disponibilidad de datos, ordenación, ejecución y liquidación. Cada capa tiene una clara división del trabajo, desde la recolección de datos hasta la confirmación final en la cadena, asegurando la resiliencia de la red y una alta escalabilidad, adecuada para escenarios multi-cadena y cruzados.
MOVE es un token del ecosistema que apoya incentivos de staking, pagos de tarifas de transacción y participación en la gobernanza. La distribución del token tiene en cuenta el apoyo de la comunidad, las contribuciones tempranas y las reservas de la fundación, asegurando el desarrollo saludable y sostenible del proyecto.
En 2025, los incidentes de manipulación relacionados con los fundadores llevaron a una pérdida de confianza, haciendo que los ajustes en el equipo y la reestructuración de la marca sean una prioridad. En el futuro, el enfoque estará en la expansión tecnológica, la interoperabilidad entre múltiples cadenas y la optimización de los mecanismos de gobernanza para consolidar el liderazgo en la infraestructura Web3.